jueves, 10 de enero de 2019

LOS MANICOMIOS DEL PASADO


LOS MANICOMIOS

La palabra “loco” en el transcurso de la Historia se ha utilizado demasiadas veces contra personas que padecían enfermedades que en su momento la Medicina no alcanzaba a comprender, designándose como locura hasta final del siglo XIX, a un determinado comportamiento que rechazaba las normas sociales establecidas y la desviación de la norma (de donde procede su denominación: del latín vulgar "delirare, de lira ire", que significaba originalmente en la agricultura "desviado del surco recto"




"La casa de locos" de Francisco de Goya,  Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Madrid

El tema de los establecimientos psiquiátricos estaba en las tertulias de los ilustrados españoles, y  este oleo de Goya, podría suponer una denuncia de la situación lamentable, de estas instituciones de beneficencia.



En sus orígenes fueron los templos griegos, donde se acogía a los dementes:




Pero ya, en la última parte de la Edad Media, los manicomios fueron creados para “quitar” de las calles a personas con enfermedades mentales.
 En realidad, estos “manicomios” eran cárceles. Rodeados de suciedad y oscuridad, y cuando los pacientes presentaban conductas trastornadas eran encadenadas como animales, y así eran tratados…





Mas tarde, en 1792, en un asilo de París, se llevó a cabo un experimento, fue Philippe Pinel quien en la "primera revolución psiquiátrica" hizo retirar las cadenas a estas personas y comenzó a tratarlas humanamente. Digamos que fué un paso importante, pero solo eso...


 LONDON´S BETHLEM ROYAL HOSPITAL 



Me voy a centrar en describir, como ejemplo europeo de psiquiátrico, en uno de los mas conocidos y el que más ha contribuido a crear el mito del manicomio de pesadilla: el Hospital Real de Bethlem (Beckenham, Bromley) de Londres. ​




El "Bedlam" en la actualidad

 Fundado en 1247, y aunque ya no se encuentra en su ubicación original, se reconoce como la primera y más antigua institución especializada en enfermos mentales. El hospital está hoy en día a la vanguardia del tratamiento psiquiátrico, pero parte de su historia es conocida por su crueldad y trato inhumano

Situación del Hospital

 Ha sido denominado de diversas maneras: Santa María de Bethlem, Hospital de Bethlem, Hospital de Bethlehem y también como  “Bedlam”, que en inglés significa "casa de locos" y también "confusión o follón" (El nombre se lo pusieron los londinenses que escuchaban los gritos que salían del edificio, gritos de locos enjaulados o encadenados a las paredes.)

Bethlem ha formado parte de Londres desde 1247, cuando un antiguo alguacil de Londres, donó un terreno,  para levantar un asilo que se erigíó como un priorato para las hermanas y hermanos de la Orden de la Estrella de Bethlehem, de la que el edificio tomó su nombre.



Murallas romanas de Londinium

Su primera ubicación estaba en Bishopgate, una de las puertas de la fortaleza romana existente construida en 120  d. C.,  que protegía la calzada hacia Eburacum en el norte.  (Hoy dia junto a la actual estación de la calle Liverpool)



"El padre Jofré, defendiendo a un loco" Joaquín Sorolla 1887

Sus orígenes en el siglo XIII convierten a Bedlam en uno de los psiquiátricos más antiguos del mundo. Algunos autores consideran que es el pionero, aunque esa afirmación está lejos de suscitar unanimidad. El catedrático de Psiquiatría J.J. López-Ibor sostiene, por ejemplo, que ese honor lo ostenta un hospital fundado por el padre Jofré en Valencia en 1410



El plano del hospital de Bethlem se reproduce en el libro de Daniel Hack Tuke, "Capítulos de la Historia de los locos en las Islas Británicas" (Londres, 1882)

Los mapas de los primeros años del siglo XVI muestran Bedlam, cercano a Bishopgate, como un patio con unas pocas construcciones en piedra, una iglesia y un jardín. Las condiciones eran entonces espantosas, y el cuidado era poco más que moderado.




Había 31 pacientes, estando los más violentos y peligrosos maniatados y encadenados al suelo o las paredes. A algunos se les permitía marcharse, e incluso mendigar.


Jacobo I de Inglaterra

En 1598, cuando el ayuntamiento de la City encargó un estudio sobre su funcionamiento. Las conclusiones que se obtuvieron, fueron que este, no era un lugar apto para ser habitado por seres humanos, sucio y repugnantemente mantenido. Aunque eso no significó ningún cambio. El rey Jacobo I nombró a un nuevo gestor, Helkiah Crooke, que únicamente se preocupó por robar todas las donaciones que el hospital había recibido y a obligar a los enfermos a pagar por la comida con un lógico resultado: el que no podía pagar, moría de hambre.



"El rey Carlos I a caballo"de Sir Anthony van Dick (1599-1641)

Una nueva inspección llegaría cn el rey Carlos I en 1631. Un aparente soplo de humanidad, puesto que de ella se derivó la contratación de un cirujano, un médico y un boticario, los primeros facultativos que pisaban el centro desde su inauguración.


Se decidió incluso trasladar las instalaciones a otro lugar, un nuevo palacio aparentemente más salubre y adecuado y así, en 1676 el antiguo edifico medieval se mudó a uno nuevo y opulento situado en Moorfields. Su creador, Robert Hooke, quiso que fuera el Versalles de Londres y tiró la casa por la ventana: proyectó una fachada de 165 metros de largo, columnas corintias, torre con cúpula y jardines
Grandioso, pero una ruina total. La pesada fachada no tardó en resquebrajarse y el hospital sufrió graves filtraciones. Escritores como Thomas Browne dudaban de si los "locos" eran los internos o los responsables de aquel despropósito.



Estas estatuas, que se cree que representan la locura delirante y melancólica coronaron las puertas de entrada, se han conservado y se pueden ver en el Museo de la Mente en el actual Hospital Real de Bethlem. Grabado por C. Warren, 1808, después de C. Cibber, 1680. Wellcome Library, Londres

 Hasta 1700 los lunáticos no fueron llamados "pacientes" gracias al psiquiatra holandés Paul Vicent. De 1725 a 1734 se abrieron las salas de "cuarables" e "incurables".



Grabado de la octava impresión de William Hogarth es "A Rake's Progress" que representa reclusos en el Hospital Real de Bethlem.



El Bethlem del siglo XVIII fue retratado en una escena de William Hogart "A Rake's Progress" (traducido como "La vida de un libertino"), de 1735, donde se muestra en ocho imágenes la vida de Tom Rakewell, hijo de un rico comerciante, que malgasta su dinero en una vida de lujo, prostitutas, el juego y al final acaba su vida consumido y desesperado en una lúgubre sala de Bedlam.



En 1815 Bedlam se movió a los Campos de St George, Southwark, a un edificio diseñado por James Lewis (añadiéndose una cúpula más tarde, diseñada por Sydney Smirke)



 En 1930, el hospital se trasladó a otro suburbio de Londres, situándose en Monks Orchard House, entre el parque Eden, Beckenhan y Shirley. El viejo hospital y sus dependencias fueron adquiridas por lord Rothermere, que solicitó a la diputación provincial londinense que se transformase en parque.


Años mas tarde, la parte central del edificio se convirtió en la sede del Museo Imperial de la Guerra en 1936.


EL ZOO HUMANO

Durante años más que un hospital fue casi un "zoo humano", una galería a donde los ricos de Londres acudían en tropel para disfrutar del espectáculo de los "locos" y se referían sin sonrojo a los pacientes como "lunatickes", una mezcla de "lunático" y "tickets". A la humillación pública se sumaban un trato cruel y condiciones deplorables.



Bethlem Hospital, Londres: los incurables son inspeccionados por un miembro del personal médico, con los pacientes representados por figuras políticas. Dibujo de Thomas Rowlandson, 1789.

https://wellcomecollection.org/works/x7rf7y4e

La visita de esa casa de locos era una de las grandes diversiones dominicales de los londinenses. El visitante tenía derecho a recorrer todas las divisiones, las celdas, hablar con los enfermos, y burlarse de ellos.
El propio hospital lo promovía y se beneficiaba de las donaciones de los visitantes y de las contribuciones caritativas.



Uno de los cuadros de Hogart



Un grupo de pacientes...



Durante el siglo XVIII y parte del XIX, Bedlam se convirtió en una atracción turística.  Los visitantes pasaban por esas verjas llamadas “penny gates”, porque la entrada costaba muy poco:  un penique – el primer martes de cada mes era gratis – y se podía contemplar el espectáculo que brindaban los pobres dementes. Además,se podían llevar palos para azuzar a los dementes y elevar el nivel del show. Algunos también les daban alcohol para ver cómo actuaban borrachos.




 En 1814 se registraron más de 96.000 visitas, en el mayor espectáculo de Londres...



Durante años, los cadáveres de los pacientes fueron utilizados para disecciones y experimentos de todo tipo y hace cinco años los obreros que trabajaban en el Crossrail de Londres (un tren subterráneo para mejorar la comunicación de la City) se toparon con una sorpresa poco agradable: Un montón de huesos humanos. Al investigar se descubrió que pertenecían al antiguo cementerio del psiquiátrico. Entre las fosas comunes con internos del Bethlem y los cadáveres que dejó la peste negra se calcula que podría haber 4.000 esqueletos.


LOS   TRATAMIENTOS


San  Ignacio de Loyola realizando un exorcismo a un endemoniado

En el siglo XIII, poco o nada se sabía de la salud mental. Los enfermos psiquiátricos eran tratados como poseídos o endemoniados, y la sociedad creía que su dolencia era un castigo, divino o demoníaco, por sus pecados.Así, la Iglesia recurría a los exorcismos para alejar al demonio Por ello, todos los pacientes, independientemente de su cuadro, recibían el mismo tratamiento motivado por el desconocimiento y el miedo.


Entre los siglos posteriores, la terapéutica de la locura era tan variopinta como las posibles causas a las que se achacaba: la medicina empírica de curanderos y hechiceros recurría a las hierbas medicinales, los sortilegios y las prácticas supersticiosas; y los médicos diplomados y boticarios recurrían a estrictas dietas, duchas de agua fría en la cabeza y a las tan temidas sanguijuelas, por mencionar algunas.


"El patio de la casa de locos" Francisco de Goya. The Meadows Collection, Dallas Texas.

El tratamiento  de los pacientes mentales frecuentemente imitaba el tratamiento histórico de los inquisidores de la Iglesia: fueron encarcelados, encadenados o sometidos a restricciones dolorosas, azotados y torturados de diversas formas.



James (William) Norris, paciente de Bethlem, 1815.

"Este es un paciente mental de un manicomio victoriano".  Fue el caso de Norris, expuesto por un periódico, lo que llevó a la reforma de Bedlam.



MÉTODOS DE INMOVILIZACIÓN



Actualmente podemos creer que todas estas prácticas eran terribles y absurdas pero, en aquellos tiempos, los médicos simplemente hacían lo que creían que era lo mejor para entender lo que estaba mal y cómo podían solucionarlo.





Un sistema primitivo empleado hasta el año 1800 para contener a un enfermo agitado eran los grilletes y las cadenas.


Se le ubicaba en una habitación de aislamiento con o sin paredes acolchadas, se le vestía una camisa de fuerza o se le enrollaba el cuerpo con sábanas y mantas.




Máscara para el criminal demente.  Estas máscaras, llamadas máscaras de tortura, se han usado durante siglos y no solo para los delincuentes.


LA TERAPIA DE ROTACIÓN



Hacia finales del siglo XIX entre sus paredes se "recetaba" la "terapia de rotación", una práctica supuestamente inspirada en las teorías de Erasmus Darwin, abuelo del famoso naturalista : en la que se sentaba al paciente en una silla suspendida en alto para que girase y girase durante largas sesiones. Se consideraba que el hacer girar al paciente se podía sacudir el cerebro y aliviar así la esquizofrenia y otros trastornos mentales.

SHOCK FARMACOLÓGICO

 A medida que la farmacología fue avanzando, se ensayó un método  que consistía en administrar un compuesto de drogas tipo “cóctel” que sumía al paciente en un estado letárgico


La “cura alcanforosa” fue iniciada por J. Von Meduna (1896-1964) en el año 1934 con el objetivo de provocar crisis epilépticas a los enfermos esquizofrénicos, la primera sustancia que se suministró fue el aceite de alcanfor, pero tardaba en actuar y no siempre producía las convulsiones, por lo que pasó a emplearse el metrazol administrado por vía intravenosa para producir un choque convulsivo pero sin pérdida de conocimiento, en especial para los enfermos esquizofrénicos, cuyo criterio terapéutico era que la enfermedad epiléptica y la esquizofrenia eran antagónicas.

INSULINOTERAPIA


Aplicación de glucosa por medio de una sonda nasogástrica a un paciente para finalizar la terapia de choque con insulina.

Fué  promovida por Manfred Joshua Sakel (1900-1957), la aplicó por primera vez el año 1932 con el fin de provocar en el paciente un coma hipoglucémico que tuviese, en términos medios, un efecto de media hora. El tratamiento podía alcanzar una o dos semanas en sesiones diarias excepto algunos días. Para que el tratamiento fuese completo se necesitaban de entre 50 a 60 sesiones.


ELECTROSHOCK  o TERAPIA ELECTROCONVULSIVANTE (TEC)


Investigaron y aplicaron esta técnica (TEC) Lucio Bini (1908-1964) y Ugo Cerletti (1877-1963) con la finalidad de hallar una alternativa al choque, productor de convulsiones epileptiformes o tónico clónicas como tratamiento de la esquizofrenia. Encontraron la solución mediante la aplicación de electricidad en el cerebro



Una "vieja máquina de choque eléctrico" utilizada para la terapia del paciente en St. Elizabeths a principios del siglo XX (1920)

 La técnica consistía en el empleo de unos aparatos generadores de descargas eléctricas que, provistos de electrodos, se situaban en las regiones frontoparietales previamente bañados de una solución salina conductora, al activarlos producían un electrochoque cerebral Los receptores del procedimiento eran y son enfermos esquizofrénicos, o con estados depresivos, de delirio y manía. A partir del año 2005, y por indicación de la OMS, por escrito, debe solicitársele permiso al paciente antes de aplicarle este tipo de tratamiento.




MALARIOTERAPIA O PIROTERAPIA


Julius Wagner von Jauregg y la aplicación de su terapia

Ya Hipócrates había visto que algunas personas afectadas por un trastorno psiquiátrico que tenian convulsiones  que durante un ataque de malaria mejoraban su estado mental
Fue introducida por Julius Wagner von Jauregg (1857-1940), la aplicó el año 1917,consistía en inocular intravenosamente al paciente el germen patógeno Plasmodium Falciparum obtenido de la sangre de un paciente enfermo de paludismo.  el período de incubación de este Falciparum era de unos 10 días, tras los cuales, el enfermo padecía un acceso de 39 grados de temperatura, con síntomas de malestar general, cefaleas y sudoraciones profusas.   Posteriormente se le administraba al paciente clorhidrato de quinina que paliaba los efectos de la infección, como la anemia secundaria y caquexia

HIDROTERAPIA


La palabra hidroterapia es sugerente de balneario, pero nada más lejos estaban los manicomios de proporcionar el efecto beneficioso de las cálidas aguas termales.

 
Los baños o duchas de contraste que se aplicaban era otro método de choque que consistía en lanzar, con la ayuda de una manguera a presión, un chorro de agua caliente y fría de forma alterna.



También las terapias de vapor eran frecuentes para calmar a los pacientes

LOBOTOMIA


En los años 50 era muy común en los pacientes con  depresión y esquizofrenia, a los cuales esta intervención volvía más tranquilos y cooperativos.




Consiste en efectuar una trepanación quirúrgica para seccionar los lóbulos frontales del paciente, el impulsor fue Egas Moniz (1874-1955) cuyo fin era curar la epilepsia. Los lóbulos frontales se consideran el asiento de la inteligencia pero, para los defensores del tratamiento quirúrgico, la inteligencia se localizaba en la totalidad de la corteza cerebral.

 TREPANACIÓN


"Extracción de la piedra de la locura" El Bosco

Con la trepanación se intentaron curar migrañas, convulsiones y otros procesos mentales.



Craneotomía

Aunque fueran unos procedimientos rudimentarios y sin ningún tipo de asepsia, muchos pacientes no sobrevivieron al procedimiento.

EXTRACCIÓN DE ÓRGANOS


El Dr. Henry Cotton, un psiquiatra de principios del siglo XX, creía que los trastornos mentales eran causados por bacterias en el interior del cuerpo. La solución mas logica para los doctores de entonces, era abrir a los pacientes y quitarles los órganos que tuvieran, según ellos, algún tipo de anormalidad. Pocos sobrevivieron al proceso...

TRABAJOS


Consistía en instigar a los enfermos para que trabajasen realizando labores  en la cocina, el lavadero, la costura, la limpieza, el huerto, los corrales, etc. para así tenerlos ocupados.
En la actualidad se realiza una terapia ocupacional mucho mas racional y útil.


OTRAS "PATOLOGÍAS Y TRATAMIENTOS"

 LA "HISTERIA"



Fotograma del film británico "Histerya"

Durante la época victoriana era muy común que una mujer fuese diagnosticada con histeria. Sus síntomas incluían desfallecimientos, insomnio, retención de liquidos, espasmos musculares, respiración entrecortada, irritabilidad, fuertes dolores de cabeza, pérdida de apetito y, ojo al dato: tendencia a causar problemas.




Consolador a vapor

Las pacientes con histeria femenina debían recibir un tratamiento conocido como  "masaje pélvico" en la que el doctor estimulaba los genitales de la mujer hasta producirle un orgasmo.
Al parecer, lo hacían porque consideraban que el deseo sexual reprimido de las mujeres era una enfermedad.



Otra forma habitual de tratarlas era con el lavado vaginal, el cual podéis ver ilustrado en la imagen de arriba.


LA LECTURA EN LAS MUJERES


 Hubo un tiempo en que los hombres pensaban que si una mujer era asidua a la lectura, esta acabaría loca. De hecho, llamó mucho la atención el caso de una mujer que pasó largos años en una institución mental por haber sido encontrada leyendo a las 5:30 de la madrugada.


HOMOSEXUALIDAD



La homosexualidad fue considerada lamentablemente, como una enfermedad de salud mental, por lo que la mejor manera de tratarles era enviándoles a una de estas instituciones.

MASTURBACIÓN


En aquella época se pensaba también, que la masturbación podía llevar a la locura. Muchos pacientes con enfermedades mentales graves tenían problemas para contenerse a sí mismos y se masturbaban por todas las instalaciones. Estos cinturones tenían el cometido de evitar que los pacientes se tocaran.




Definición de SALUD por la OMS (Organización Mundial de la Salud)



FUENTES:

https://h2g2.com/edited_entry/A2554157

http://www.badnewsaboutchristianity.com/gan_insane.htm

https://es.wikipedia.org/wiki/Hospital_Real_de_Bethlem

https://magnet.xataka.com/un-mundo-fascinante/la-infausta-historia-de-bethlem-el-psiquiatrico-que-exponia-a-los-enfermos-mentales-como-un-zoo

https://www.bbc.com/mundo/vert-cul-38517703

http://index-f.com/gomeres/?p=265

http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0185-16592009000100008

https://es.slideshare.net/alinslide/breve-historia-de-la-locura-6382435

https://www.youtube.com/watch?v=ezSkFQttKJM HISTORIA

https://historic-hospitals.com/2016/02/13/building-bedlam-bethlem-royal-hospitals-early-incarnations/


BIBLIOGRAFÍA:

"Historia de la Psiquiatría Española": Juan José López Ibor

"El Tratamiento Moral de la Locura", François Leuret

"Tratado de psiquiatría", Henri Ey, Paul Bernard (1995). Elsevier España


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